domingo, 26 de octubre de 2025

PR.LE.-28:La Cervatina y el Pico Mahón [Puebla de Lillo]

Ruta de senderismo por Puebla de Lillo, recorriendo el bosque de la Cervatina y subiendo al Pico Mahón, de la bajada mejor no hablar. La zona de Puebla de Lillo llevaba tiempo apuntada en la lista de pendientes, y aprovechando el otoño en el hayedo, junto con una previsión de lluvias en Asturias, cruzo la frontera. Descargué un track de wikiloc con una ruta circular, y no leí completo la información, y cometí el mismo error, una bajada mala entre escobas sin senda. Así que mejor buscar otro tipo de track para hacer una circular sin sorpresas.
El bosque estaba muy guapo, con las hayas, y algún aislado texo rodeado por las hayas. La mayoría del recorrido es por pistas en el interior del bosque, la subida al Pico Mahón es por una especie de cortafuegos recto y muy pendiente, pero sin complicaciones. La bajada mejor buscar otra opción. Otra zona muy guapa fue la vuelta hasta Puebla de Lillo desde el Área Recreativa, pasando por una foz a media altura siguiendo un sendero entre robles. Las rutas están señalizadas suficientemente, hay un banco mirador y otra mesa en medio del bosque.

La ruta es larga, pero se lleva bien por estas pistas, hay algunas fuentes, pero están al comienzo o casi al final, cerca del área recreativa, igual en una cabaña-refugio hay otra fuente, pero no estoy seguro.

Datos de la ruta:

Distancia: 22,5 km
Duración: 7h 15 min
Cota mínima: 1136 m
Cota Máxima: 1907 m
Desnivel Acumulado: 1146 m
IBP: 113 Hiking


Mapa del recorrido
Llego a Puebla de Lillo temprano, aprovechando el no cambio de hora vamos, y aparco en el centro del pueblo. Desde aquí comienzo a caminar por una pista siguiendo el PR.LE.-28 de la Cervatina, hay un cartel con el mapa, y después postes indicadores. El día comienza oscuro, con las nubes enganchadas en el Susarón, pero la previsión es que vaya abriendo.

Saliendo de Puebla de Lillo

Burrinos
El primer tramo es casi en llano, por el valle al lado del Arroyo y pista ancha. Las nubes van poco a poco moviendose, pero está bastante fresco. Los árboles empiezan a mostrar los colores dorados y ocres del otoño.

Ladera del Susarón

Chopos dorados y Pinos de Repoblación

La fonte del Obispo
Al cabo de unos dos kilómetros se llega hasta una pequeña área recreativa, con una mesa y fuente, la Fonte del Obispo. Los bosques de esta zona son pinos de Repoblación. El valle y el arroyo continúan su camino, y hay algúnos jitos en el camino que parecen guiar en la subida al Susarón.

Bordeando los pinos
Tras unos tres kilómetros y medio el camino se bifurca, según la señalización siguiendo de frente se va hacia el área recreativa de Pegarúas, y por la izquierda se continúa hacia la Cervatina. Así que giro hacia la izquierda, y comienza la zona de hayedos.

Bifurcación, hacia la izquierda



Comienzan las fayas

Fayas Jóvenes

Escobas, Serbales y Fayas

En el terreno aparecen crestones calizos por encima de los bosquetes de fayas, no son fayas viejas granes y retorcidas cómo en otros bosques asturianos, aquí son todavía jóvenes de troncos delgados, y bastante altura. Zona guapa para recorrer, además aquí empieza la subida más fuerte, o se nota más, así que ir más despacio para disfrutar y sacar las fotos. 

Llegando a la campera del desvío
En una campera, hay otra bifurcación, y ahora hay que coger  la pista de la derecha, que continúa girando por el bosque. Deben ser pistas madereras, y son muy anchas, pero están todas tapizadas con las hojas de la fayas. Para la bicicleta, toda esta hoja tapa las piedras y las grietas que escarba el agua, sino sería un sitio muy guapo para dar una vuelta, no sé si está permitido.

Nuevo tramo de bosque

El cielo azul, las fayas, las fueyas por el suelo
La subida acaba en un banco mirador, de Peña Solana, uno de esos crestones calizos que se imponen al hayedo. Había un libro en una bolsa de plástico, un sitio complicado para el book crossing. Las vistas un poco mermadas por las nubes sobre la cordillera, pero buenas hacia los bosques y peñas de la zona.

Mirador de Peña Solana
La pista ahora baja por el bosque y recorre a media ladera la falda del montaña, atravesando varios arroyos, zona muy guapa. El último es el Ruidosos, según la carcelería, pero hoy estaba tranquilo, por aquí tampoco ha llovido demasiado esta temporada.

Uno de los arroyos

Arroyo ruidosos
Tras cruzar el arroyo, la pista sigue faldeando la montaña de Aparejo Pequeño, y se puede ver el bosque por el que vamos pasando desde alguno de los claros. La curva es grande, así que aparece el mirador, y la Peña de la Solana bastante arriba.

En el collado, el mirador de la Peña de la Solana

Otro tramo de bajada

Cartelería y más bosque

Fayas jovenes
El bosque está muy guapo, oscuro cómo son todos los hayedos, pero ahora en otoño cuando el sol se filtra un poco, el dorado y los ocres destacan mucho. Debería de haber también setas, pero está todo demasiado seco, y eso que por aquí deberían de ser suficientes las nieblas que suele haber, pero nada. 

Mesa en el Paseo del Oso
Tras pasar la mesa, en el collado Ruidosos, otra bifurcación de la pista, a la derecha volver a Puebla de Lillo, a la izquierda continuar hacia la Cervatina, y el bosque con Tejos. 

Sierra del Arveyal

Por ahí arriba el Pico Mahón en la Sierra de la Cuerna

El camino otra vez se mete al hayedo, y vuelta a los colores, además son rectas enormes en estas pistas, está más para bicicleta que para caminar. La zona de los tejos está vallada, no sé muy bien porque, y hay una puerta para acceder que no tiene cierre. Yo doy una vuelta viendo algunos tejos, viejos, jovenes y algunos retoños. No es un árbol que me llame la atención, quizás por ser venenoso, en casa de mi padre había uno, pero al ampliar un poco la carretera le tocaron demasiado las raíces y se seco. Además crecen super lento.


Roble imponente

Tejos

Tejos entre fayas

Una vuelta pequeña viendo algunos de los ejemplares, los más gruesos deben de haber visto varios siglos, más que las hayas que los rodean. Con la sombra que dan las hayas no sé cómo sobreviven, porque tampoco es que sean especialmente altos y puedan competir por la luz en altura.

En pareja

Vuelvo a la pista, cruzo otra vez la puerta y el vallado y sigo subiendo hacia la collada Ferreras. Subida fuerte, y el bosque se acaba pronto, aquí empieza el territorio de las escobas, que han estado desbrozando recientemente por los restos que quedan.
Última curva con bosque

Zona desbrozada y el Pico Mahón
Al abrirse el terreno se ve ya la mole del Pico Mahón, con la estrecha cinta del cortafuegos, que sube recto hasta la cumbre. Desde aquí parece que tiene menos pendiente, después ya metidos en faena la cosa tiene miga.

Collada Ferreras
En la collada unas vistas hacia el Pantano del Porma y las montañas que lo rodean, y por detrás donde se pierde la vista las llanuras del Páramo leones. 

El cortafuegos??
Así que poco a poco empiezo a subir por el estrecho cortafuegos, hay camino a los dos lados de la alambrada que delimita los pastos, por la derecha es más estrecho, y por la izquierda está menos definido. A veces parece que hay zetas en la senda, pero no está claro, los animales que suben y bajan por aquí marcan y cambian el trazado a su antojo. Esto si es un cortafuegos es demasiado estrecho, no puede cumplir su función, y con esta hierba alta seca menos.

Vista atrás con el Susarón asomando

Esto es eterno
La subida se hace larga, hay como dos descansillos antes de llegar a la cumbre, que cómo en muchas montañas es doble. La primera no es la que tiene el buzón, aunque para mí tiene las mejores vistas hacia el pantano del Porma.

Embalse del Porma

Primera cumbre el Pico Mahón
Paro un rato en esta cumbre y como el bocata, con las vistas hacia el embalse, y un poco protegido del viento que hay, que es fresco fresco. Hacia el Norte nubes cerradas, hacia el Sur día más despejado. Una foto esférica, y algunas panorámicas.


Panorámica al Susarón

Panorámica hacia el embalse
Tras la comida, una pequeña bajada y subida para alcanzar la cumbre principal que tiene el buzón de cumbres, y vistas hacia el valle del Curueño, otra zona poco conocida por mí, y en la que hay apuntadas varias rutas: Valdorria, Peña Galicia, Sancenas...

Hacia la cumbre principal

La cumbre principal con el buzón


Hacia el Norte

Hacia el Oeste

Hacia el Bodón

Tras las fotos de rigor continúo la ruta, y aquí es donde la cago porque sigo el track, descartando opciones con muchisima mejor pinta que por donde acabo bajando. Primero bajo hasta la collada Tolibia, donde, por ejemplo se ve una traza que de sendero que baja a media ladera, y que incluso después veré que el comienzo tiene hasta rodadas, después ya no sé lo que habría.

Bajando hacia la collada Tolibia, yo sigo de frente por la pista

El Bodón y la vaca retorcida

Vista atrás de la pista seguida

Hacia el Rebueno
Sigo por la pista hasta una collada debajo del Rebueno, donde la pista va hacia la izquierda, y el track que sigo se mete hacia la derecha por un sendero que bordea la cumbre del Rebueno. Aquí ya empiezo a temer que esto no va bien, mucha escoba.

Por debajo del Rebueno, rebecos?
Van apareciendo senderos, y bordeo el rebueno, mientras un rebaño de rebecos pasan por encima a bastante velocidad. Después el sendero se mete en las escobas, y desaparece, así que subo hasta la collada, para seguir por la parte alta de la Sierra de la Cuerna.

Vista atrás
Desde lo alto de la Sierra veo que el track no tiene sentido, no hay camino, así que toca bajar por donde mejor se pueda entre las escobas, buscando el valle por donde continúa el track. El primer objetivo una zona de pradera que aparece más abajo, y que podría tener algo de senda.

Por entre las escobas hasta la primera pradera
Las escobas tienen senderos de la fauna, y dejan llegar hasta la zona de pradera sin demasiado problema, vuelvo a estar sobre el track, pero sigue sin haber sendero. La dirección que interpreto del track, es hacia otra zona de praderas más abajo y a la izquierda, tengo que cruzar en diagonal para llegar.

Hacia esas praderas amarillas
Aquí las escobas están algo más crecidas, y la inclinación es mayor, pero sigue habiendo trazas de paso de los animales que permiten progresar. Con cuidado, y buscando referencias, cómo algunos árboles, voy avanzando hacia la zona de pradera. En la zona baja de las praderas amarillas se ve una cabaña refugio para los ganaderos de la zona.

Serbales y las praderas más cerca

Por fin en la pradera
Tras esta bajada un tanto xabaz, llego a la pradera, zona civilizada y empiezo a oír voces. Hay un grupo de montaña que viene rodeando desde el valle de Iyarga, y llegan los sonidos perfectamente. Así que continúo bajando por la pradera, viendo al fondo la cabaña refugio de los ganaderos.

El grupo de montaña bajando por la senda en la ladera de enfrente

El ganado y al fondo la cabaña refugio con tejado rojo
No hace falta llegar a la cabaña, enseguida aparece una nueva pista, que habrá que seguir hasta el área recreativa y la capilla en Pegarúas. Es todo pista y se hace largo, pero el bosque está en su punto.

Bosque

La pista por el bosque

Hayas, y más hayas
La pista al principio sube, y después llanea para hacer dos amplias zetas y volver a bajar al valle. Los del grupo de montaña, quedan por detrás, y no sé si han atajado siguiendo por el fondo del valle, o van a seguir por esta pista también.

Sierra del Arveyal
En una de los giros de 180 grados, se ve el bosque y la Sierra del Arveyal, con los colores adecuados, aunque todavía falta un poco para llegar al ocre más típico.

Hayas jóvenes

Tejos entre las fayas

Uno de los arroyos que bajan por la zona
La pista alcanza por fin el fondo del valle, por donde discurre el arroyo Rebueno, y comienza un tramo llano, por paisaje más abierto. En las laderas sureñas han plantado pinos.

Recorriendo el valle
Ganado y los pinos de repoblación
Es curioso ver las vacas roxas sin cuernos, les ponen el ungüento como a las frisonas para poder trabajar con ellas sin peligro, pero para estar solas por estos montes no les vendría mal algún arma disuasoria.

Buenos prados, y en ese prado otro par de corzo, macho y hembra
El macho con su cornamenta

En uno de los prados, de la que me acerco veo dos rebecos entre las vacas, en cuanto me perciben empiezan a cruzar buscando la salida del prado, primero en una dirección y después en la contraria, para saltar el arroyo y empezar a subir por la ladera. En el camino estaban unos burrinos, pero estos son más tranquilos.

Los burrinos

Llegando al área recreativa
Continúo por el camino, veo que marcan una fuente bajo el camino, pero no me acerco, y enseguida llego hasta el área recreativa de Pegarúas, con mesas y un pequeño aparcamiento.

Área recreativa de Pegarúas
Cerca hay una antigua ermita, o algo así, enpericotada en un cerro, aunque no me acerco. Según el track quedan dos kilómetros más o menos hasta Puebla de Lillo, aunque según los carteles de la PR son algo más. Y es que la PR rodea el Pico del Aguila yendo hacia la carretera. El track que llevo se mete por un valle estrecho y va más directo hacia Lillo.

Ermita de Pegarúas
Cruzo al prado, y me meto hacia el valle. Hay un sendero señalizado, pero yo sigo el track y remonto la ladera por una zona de prado, hacia una pequeña laguna seca, la laguna del Agüezo.

Cruzo al prado


Panorámica de la vista atrás, inicio del valle de Rebueno y de Iyarga

Laguna de Agüezo
Tras pasar la laguna seca, ya enlazo con el sendero PR que atraviesa el valle de Celorno, o así parece indicarlo. Es un tramo de la ruta muy guapo, un valle estrecho y vamos a media altura  con un cortado hacia el arroyo, y pasos entre roca muy guapos.

El Susarón, y la señalización del sendero


El sendero por el valle, y pasando por las rocas calizas

Después del cortado sobre el arroyo, viene un tramo de robles y, por fin la bajada hacia Puebla de Lillo. Comienza a aparecer el Susarón también, con sus laderas cubiertas de fayas.

El Susarón

Plegamientos en Chevrón
El sendero se convierte en pista, y baja hasta Puebla de Lillo entrando por una zona de casas. Sólo queda llegar hasta el coche, Puebla está bastante concurrida, hay cómo cinco autobuses de distintos grupos de montaña aparcados.

Puebla de Lillo


La Torre Circular

Doy una vuelta al pueblo, visito la Torre Circular, y arranco para casa, que queda un buen tramo de coche todavía.