Ruta de senderismo, haciendo la clásica Ruta de las Xanas para comer en Casa
Generosa en Pedroveya, y después bajar tranquilamente por Valdolayés, zona que
no conocíamos. Casa Generosa cierra los miércoles, por cierto.Nos lo tomamos
con mucha calma, porque era una ruta para todo el día y disfrutar del día,
aunque al final el viento fue un poco molesto. La ruta no tiene complicación,
y es muy transitada, y la verdad es que da pena como esta ahora: hay klinex o
restos de papel cada 10 metros, habría que armarse de guantes y bajar
recogiendo, seguro que se recogen unas cuantas bolsas. En otros sitios que
apenas va gente no se aprecian tantos restos de papel, pero aquí es que es
increíble deberían poner un cartel avisando abajo de que no vayan dejando
estos restos por el camino, aunque justo al comienzo de la ruta, en el desvío
de la carretera también hay algunas bolsas con los restos dejados por los
perros. Esta bien que recojan los excrementos pero que los lleven por lo menos
hasta el contenedor doscientos metros más abajo. Las cacas de perro pueden
producir abortos al menos en vacas, no sé si en algún otro mamífero salvaje,
la enfermedad se llama
Neosporosis y la transmiten los perros, por eso deberían de ir controlados. La mayoría de
los
animalistas urbanitas lo desconocen, y cuando van al campo pueden
estar causando grandes daños al entorno.
Datos de la ruta:
Distancia: 9,2 km
Duración: 7h 12 min
Cota mínima: 195 m
Cota Máxima: 633 m
Desnivel Acumulado: 486 m
IBP: 50 Hiking
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Mapa del recorrido |
La ruta comienza un poco antes del pueblo de Villanueva, está indicado en la
carretera. Hay un pequeño aparcamiento al pie del bar de las Xanas que se
llena rápido, después también hay un prado bastante irregular donde se puede
aparcar, y también en la carretera general han asfaltado ahora el arcén para
poder aparcar. Cualquier día se suelen llenar las tres zonas.
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Inicio de la ruta |
Desde la pequeña área recreativa se comienza la ruta siguiendo la carretera en
fuerte subida, hay una acera para evitar accidentes. A unos doscientos metros
se encuentra el desvío para entrar a la foz por el estrecho camino. También
esta el cartel de la ruta, un poco maltratado.
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Indicio del sendero a la foz
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El primer tramo es por una zona de pedrero en subida hasta entrar a la foz,
tramo de subida, y después ya se reduce bastante la pendiente. Madrugando no
hay mucha gente, pero a media mañana esto está bastante concurrido y hay que
ir con precaución en algunos puntos para cruzarse. Nosotros coincidimos con
gente corriendo y la verdad es que puede ser peligroso en algunas curvas sin
visibilidad,por eso madrugan para que no haya gente.
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Villanueva al fondo y la carretera
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Entrando en la foz |
Hay gente con vértigo que puede darle cierto respeto entrar y recorrer algunos
de los tramos, aunque no tienen especial complicación es una plataforma
bastante ancha y es bastante complicado tener un accidente. Bueno, también hay
dos zonas con argayos que son un poco más estrechos.
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Tramo excavado en la pared
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Vista atrás del sendero y la entrada a la foz
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En la pedrera zona de argayos
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Nuevo tramo excavado en la roca
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Uno de los túneles del recorrido
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Tras el tramo de foz, más aereo se alcanza una zona de bosque donde ya estamos
al lado del río. Esta zona invita a acercarse al río y pararse un rato a
disfrutar del sonido del agua y de las cascadas que hay. Son pequeños saltos,
aunque hay algún tramo entubado que después si que tiene grandes caídas.
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Cascadas cerca del camino
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Un poco más arriba si que hay un salto de agua más grande, con una buena poza,
creo que se origina por una represa para los molinos que hay en la zona
(restos de molinos). De uno se ve una tubería que servía para conducir el agua
manteniendo la presión.
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Salto de agua y restos de los molinos
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Restos del otro molino
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A partir de los molinos se inicia un tramo de escalones, y después hay dos
opciones, si no hay hierba alta se puede seguir más o menos de frente, cruzar
el arroyo y subir hasta la Iglesia de Pedroveya por el prado, y si hay hierba
rodear siguiendo las marcas del camino. Hoy seguimos rodeando y subiendo por
las escaleras para no meternos en el prado y subir más despacio, porque el
prado es bastante pendiente.
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Árbol decapitado por la nevadona de Octubre
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Tramo de escaleras |
En esta zona que no tiene tampoco demasiada altitud, hay un montón de árboles
esmochados por las nieves de Octubre, ha destrozado muchos árboles y
arrastrado materiales. Hay zonas llenas de ramas que han tirado los vecinos al
limpiar los caminos.
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Bajando para cruzar el puente y comenzar la subida final a ala iglesia
por pista
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Hay un desvío para subir al siguiente pueblo el de la Rebollada, está indicado
así que no hay porque equivocarse. Tras la subida final se llega hasta la
Iglesia de Pedroveya con su tejo, y unas mesas y piedras para sentarse y comer
el bocadillo, aunque hoy toca el pote en Casa Generosa.
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Iglesia de Pedroveya y el Tejo medio seco
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Al fondo del valle la Rebollada y por detrás la Airúa Naval
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Estuvimos un buen rato tomando el sol en la Iglesia, hasta que comenzó a entrar
viento fuerte que levantaba polvo y tuvimos que ir ya hacia Casa Generosa.
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Pedroveya |
Por la carretera en suave bajada se llega hasta Pedroveya, con guapas casas
bastante cuidadas, y también horreos debajo de los cuales también están mesas
para comer el menú.
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"Parking para carro del país"
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La comida es contundente pote o fabada siempre, y después alguna sopa para
elegir como primero, y después carne guisada de segundo: cabrito, ternera y
este día jabalí. Lo que mejor suele estar, por lo menos las dos veces que he
estado es el cabrito. En Pedroveya hay fuente, es de traída y está clorada,
así que puede que guste demasiado.
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Dosango |
Tras comer continuamos ruta yendo hacia Dosango por un camino hormigonado,
primero en bajada y después en subida, que tomamos con calma para no forzar
después de la copiosa comida. Conforme se va subiendo aparecen las vistas
hacia el valle y la Sierra del Aramo, con la Mostayal bastante cerca.
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Vistas hacia la Mostayal
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Vistas a la Sierra del Aramo a la izquierda y en el centro la Airúa
Naval
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A la entrada desde Pedroveya, según un cartel estaría la casa de la Hiedra,
donde se repartían los pastos y derechos sobres los mismos, hoy en día es una
bonita casa rural. Hay que atravesar el pueblo hasta la Escuela, es en subida
y no tiene mucha pérdida, aunque no vendrían mal algunas marcas del PR.
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Casas en Dosango |
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La Escuela de Dosango
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Desde la Escuela se coge la carretera en bajada. También han señalizado la
subida hasta la peña que esta encima del pueblo: Peñarey (que usan con dos
nombres distintos para dos pequeñas cumbres, fruto de las combinaciones
posibles de letras: Penarey, Penarrei, Peñarey, Peñarrei...).
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Desvío de la carretera
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A unos cuatrocientos-quinientos metros desde el pueblo está el desvío hacia el
valle de Valdeolayés. Según el cartel principal de la ruta en las peñas de la
derecha de este valle hay un comedero para buitres. En el camino si que
habían unas cuantas costillas limpias, que algún otro bicho habría traído
hasta aquí.
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Bajando por Valdeolayés
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El camino es una pista porque hay una caseta de toma de agua más abajo,
después se estrecha un poco y baja una tubería por el camino, o eso parece por
el gran bordillo de hormigón que hay a modo de banco.
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Vistas hacia el Plantón
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En una de las revueltas de este tramo, en el que estábamos a la sombra, porque
parece mentira pero para ser Marzo el día está caluroso, y nos podíamos sentar
en el hormigón estuvimos otro buen rato. Una zona con vistas hacia el Plantón,
al cual habíamos subido desde
Villanueva. Desde aquí se ve la ruta casi completa.
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Revuelta en el camino
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Según las indicaciones de la ruta en esta zona también había un castro celta
pero no vimos ningún cartel ni nada explicando, así que debe de estar
enterrado para protegerlo.
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Panorámica hacia el Plantón
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La bajada continúa por una zona que han estado repoblando con árboles
autóctonos, pero el camino está bastante destrozado. Parece que lo han labrado
porque debía de tener profundas roderas, pero no lo han compactado así que
tiene pinta de que se va a convertir en un pequeño barrizal.
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Camino medio roto en bajada
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Continuamos la bajada y pasamos por encima de un depósito de agua, aquí
arrancaba otro camino para evitar la carretera, pero la señalización no
parecía la oficial así que bajamos hasta la carretera, pero después
comprobamos que sería mejor seguir por el camino para evitar la peligrosa
curva en la estrecha carretera.
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Llegando a la carretera
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Por carretera ya fuimos volviendo con fuerte bajada hasta el coche. El tramo
de carretera se hace largo y pesado, por eso esta senda de Valdeolayés no la
recorre mucha gente.
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Tuñón |
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Bajando hacia el coche
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Los datos de la ruta, tomandola con mucha tranquilidad y comiendo placidamente
el menú son las 7 horas, sin parar son las dos horas y algo que aparecen abajo.
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