domingo, 20 de mayo de 2018

Peña Tromeu [Teverga]

Ruta de montaña ascendiendo a Peña Tromeu desde Villanueva en Teverga. Buscabamos una ruta sencilla, sin demasiado desnivel, y esta ruta llevaba tiempo apuntada.  El reportaje en el blog de Los de las Claras me lo había recordado, así que nos acercamos a completar la ruta. La ruta tiene algo de barro en la bajada lo que complica un poco el camino, pero es la única zona mala, el resto es cómodo. Casi siempre son senderos o antiguos caminos que están medio olvidados, no hay señalización pero más o menos se puede seguir sin complicaciones. Hay una zona quemada que ha despejado la zona de subida, pero que le da un aspecto bastante inhospito a la zona, menos mal que después se atraviesa un bonito bosque de hayas. Hay fuentes en el camino donde reponer agua fresca. La cumbre no tiene mucha altura, pero tiene buenas vistas de todo el valle de Teverga y las zonas cercanas.

Datos de la ruta:

Distancia: 12,7 km
Duración: 6h:35 min
Cota mínima: 717 m
Cota Máxima: 1339 m
Desnivel Acumulado: 715 m
IBP: 72 Hiking

Mapa del reocrrido
La ruta comienza en el km5 de la carretera que sube al Puerto de San Lorenzo desde Teverga, después de pasar el pueblo de Villanueva. No hay sitio para aparcar el coche, hay que buscar apartaderos en la carretera donde aparcar, y están un poco por encima de este punto kilométrico. Jumto al cartel del km5 baja un camino hasta cruzar el Río de Val de Cazana por un puente de madera.

Inicio de la ruta km5 de la carretera al Puerto San Lorenzo
Cruzando el puente sobre el arroyo
Tras cruza el puente se empieza a subir por un antiguo camino empedrado por en medio de un bosque. Las lluvias han ablandado el terreno, y debió de haber bastante aire también porque hay un montón de árboles tirados. El camino está prácticamente cerrado, hay que salirse para superar los obstáculos. Uno de los castaños inmensos cubre completamente el camino.

Árboles caídos en el camino
Tras superar estos árboles caminos el camino sigue subiendo hasta llegar a una zona despejada, desde la que se observa el pueblo de Villanueva y la carretera que sube al puerto. Aquí el camino continúa bordeando un prado en descenso. Hay que abandonar el camino y seguir por el bosque medio quemado hacia arriba, primero de frente practicamente hacia las peñas de Biforcos, y después ya buscar un sendero hacia la izquierda, que va a media ladera por la zona quemada.

Campera donde se abandona el camino
En la zona quemada el sendero es ahora bastante evidente, con vegetación igual no lo era tanto. El paisaje es casi lunar después de los incendios, de momento no está creciendo nada, de vez en cuando unas llemas de hierba aparecen pero nada más. Es un tramo que se hace largo y cansado, tiene una pendiente constante y bastante fuerte, así que mejor con tranquilidad, además el sol empieza a calentar. Hay varios resaltes donde parece que acaba la subida, pero tras superarlo detrás aparece un nuevo tramo quemado y continua la subida.

Atravesando la zona quemada al fondo Peña Tromeu
Vista atrás a la zona de Villanueva
Tras superar la zona quemada y este tramo de subida se llega a una zona de pradera, con bosque a la derecha y escobas quemadas de frente. Los restos de sendero guían hacia las zonas de escobas quemadas, pero no tienen salida, porque al estar secas no son flexibles y forman una barrera que no se puede atravesar. Nosotros nos metimos y tuvimos que dar la vuelta para rodear, y entrar al bosque de hayas donde vuelve a aparecer un camino bastante ancho.

Bosque a a atravesar y a la derecha Braña del Rebellón

El Hayedo
Después del tramo quemado se agradece esta zona de bosque, además aquí baja la temperatura ya que vamos a la sombra. Son fayas viejas y retorcidas que son inmunes al fuego, no dejan crecer nada debajo que pueda quemar.

Cabañas abandonadas en medio del bosque
El camino sigue en ascenso y con tendencia a la derecha, es bastante evidente porque es un camino ancho antiguo, y con algo de murias a los lados a tramos. Hay que cruzar un par de riegas donde está un poco más rota, pero no tiene problemas. El bosque se hace corto y pronto se llega hasta las primeras cabañas en la Braña del Rebellón.

Braña del Rebellón
Quedan un par de teitos en esta braña, aunque necesitarían que les repusieran parte de la techumbre. Hay una fuente casi en el centro de esta braña, bueno de este barrio de la braña, porque hay otro barrio más un poco más allá. Hasta aquí llega una pista y se nota que ha permitido mantener las cabañas en buen estado.

Teitos en la braña del Rebellón
Las vistas desde la fuente en la Braña del Rebellón


Al lado de la fuente, a la sombra apetece quedarse todo el día disfrutando de las vistas, con la zona de la Sobia y detrás el Aramo. Una zona para alquilar una cabaña una temporada, pero hay que continuar ruta. La Peña Tromeu ya esta aquí al lado.

Hacia Peña Tromeu por el antiguo camino

Cabañas en el Rebellón
Por las últimas cabañas de la braña sube un camino antiguo bastante ancho, tiene también marcas blancas y amarillas del PR que recorre estas brañas, así que no tiene mucha pérdida. Hay que llegar hasta el collado, donde hay un cercado para recoger el ganado de la zona y desde ahí subir hasta la Peña Tromeu.

El camino antiguo
Nosotros nos fuimos antes hacia la izquierda para subir a la Peña Tromeu y no fuimos por el mejor camino. Hay varios senderos que remontan el primer tramo de roca, la cima esta detrás en otro nuevo resalte, y por la izquierda se pasa más o menos bien. Hay un sendero por entre el brezo y el toxo que va poco a poco rodeando las zonas de roca, y después asciende hasta la Peña Tromeu.

La cumbre hacia el Puerto de San Lorenzo
El día está muy despejado y hay poca bruma, así que las vistas son inmejorables desde esta modesta cumbre. En la cumbre hay un buzón de cumbres dedicado a un montañero (Carlos Gutierrez, Cabralitos) que falleció en un accidente de montaña, y trajeron hasta aquí sus cenizas. 

La foto-esférica da muestra de la inmensidad del territorio, y más abajo unas vistas intentando identificar algunas de las cumbres del entorno.


Vistas hacia el camin Real de la Mesa
Hacia el Sur-Este
Hacia la Sobia
Hacia el Norte

El Puerto de San Lorenzo
Después de scar las fotos pertinentes en la cumbre toca bajar, a buscar un sitio a la sombra para comer. La bajada vamos más de frente por el centro de la collada, siguiendo jitos y un sendero para llegar hasta la collada Tromeu.

Volviendo a la collada Tromeu
Tras comer vamos hasta la Braña Tuiza por la pista, para alargar un poco la ruta, también se podría ir hacia la braña de Chamaraxil, siguiendo desde la collada Tromeu hacia la izquierda por la pista. La braña de Tuiza parece que está al lado, pero la pista va dando varias vueltas y tiene algo de desnivel todavía.

Hacia la Braña de Tuiza
Cabañas de Tromeu
Por el camino se pasa por un teito, con el tejado en bastante mal estado, y eso que hasta aquí se llega bien en coche o camión para que lo pudiesen reparar.

Braña de Tuiza
Braña de Tuiza
En la Braña de Tuiza hay un par de teitos más, uno incluso con un agujero en el tejado. Hay fuente también, y muchas cabañas, debía de subir mucha gente hasta aquí en otras épocas. Llegamos hasta la carretera y damos la vuelta otra vez, primero hasta la laguna de Invierno y después hasta la braña del Rebellón.

Laguna de invierno y Peña Tromeu detrás
Desde la laguna en el mapa aparece un camino que baja directamente, pero apenas lo percibimos, está todo lleno de escobas y no se ve marca de sendero, pero no hay problema, basta con seguir la dirección y se acaba llegando a la pista y a las primeras cabañas. Es el otro barrio que no visitamos por la mañana.

Braña del Rebellón
Este barrio también tiene sus fuentes, hay que bajar por el medio de las cabañas, hasta llegar al teito de planta redonda, desde donde enfrente baja el camino hacia la carretera. También hay una segunda fuente apegada al sendero de bajada.

Teito circular en la parte baja de la braña del Rebellón
El primer tramo de sendero es de nuevo por un hayedo, terreno limpio y bastante oscuro, fresco para los días de calor. Después en una loma las hayas dan paso a robles, que ahora están con menos hoja, son más tardíos. El camino es bastante evidente y no tiene mucha perdida.

Bajando por el bosque

Después de la campa de los robles, el sendero gira y va a media ladera por una zona de brezo más despejada. Abajo se ve la carretera que sube al puerto, incluso se puede llegar a ver el coche aparcado en la misma.

Bajando hacia la carretera

Después del tramo por los brezos, el sendero enlaza con un camino antiguo y empedrado, un camino real, pero que está totalmente abandonado. Un arroyo baja ahora por el camino, y esto debe de estar pasando desde hace muchos años, porque hay senderos por el borde del camino bastante anchos y marcados.

Antiguo camino embarrado
La pendiente en esta zona es bastante grande, ir por el cauce del arroyo, antiguo camino no es recomendable, mejor por los bordes, siguiendo los nuevos senderos. En la imagen inferior se ve como un haya casi cierra con una de las ramas el camino, por aquí hace muchos, muchos años que no pasa un carro.

Camino antiguo abandonado y por la derecha el "nuevo"
Hay un tramo, a partir de una cabaña que hay en un prado, que hay que ir por el camino empedrado y resbala, así que mejor ir despacio, hay barro pero como está empedrado no te hundes, sólo resbala. El camino termina en un puente, y al otro lado ya hay una ancha pista nueva, por donde se notan las rodadas de los tractores.

Puente para entrar a la pista paralela a la carretera
La pista también tiene zonas de barro y cucho porque hay una cuadra bastante grande. Esta zona es llana, así que no hay problemas de resbalar, sólo de meter el pie hasta media pierna en las zonas de lodo. Con cuidado se pueden ir salvando, si se ve complicado, cada ciertos mietros aparece algún sendero que sube hasta la carretera que pasa paralela a la pista. La pista acaba llegando a la carretera un poco por encima de donde está aparcado el coche, sólo quedan 400 metros de carretera.

Espino Albar

Los datos recogidos por el GPS de la ruta, no se incluyendo las paradas a comer y tomar el aire.

sábado, 19 de mayo de 2018

Pico Sienra [Covadonga]

Ruta de montaña en el Parque Nacional de los Picos de Europa, saliendo desde Covadonga para subir pasando por Orandi al Sienra y Peña Cebeo, y bajando por la ruta de las peregrinaciones. Ruta no demasiado larga en distancia ni en desnivel, pero con el terreno muy roto, bastantes zonas de caliza y grandes zonas del GR-105 (Ruta de las Peregrinaciones), con mucho barro.  La ruta esta señalizada hasta la majada de Orandi, y después en la bajada siguiendo la ruta de las Peregrinaciones vuelven a aparecer marcas, aunque faltan algunas. El día no fue bueno en cuanto a las vistas porque en esta zona, a unas horas u otras acaba apareciendo la niebla aunque haya sol, así que no se veía nada en la dirección de Picos.Lo más bonito de la ruta es la zona de Orandi, y todo el valle que se abre, después también hay tramos de hayedos que se atraviesan muy bonitos, y otra zona de praderas en la zona de Peñalba que también me sorprendió bastante.

Datos de la ruta:

Distancia: 11,3 km
Duración: 5h:58 min
Cota mínima: 242 m
Cota Máxima: 827 m
Desnivel Acumulado: 630 m
IBP: 69 Hiking

Mapa del recorrido
La ruta comienza en Covadonga, y para aparcar hay que ir un poco temprano, así se puede aparcar en la explanada, o detrás de los edificios, en un campo de futbito para los internos que hay en la Escolanía. Desde aquí, queda bajar hasta delante del lago artificial donde comienza la ruta. Se puede  también pasar por la Gruta para visitar a la virgen, a la salida o a la vuelta.

La Gruta y la cascada, que hoy no hay demasiado caudal
A los pies del lago empieza la ruta siguiendo un camino empedrado, hay un cartel con las indicaciones de la ruta, creo que es la de la Reconquista y llega hasta Poncebos en unas 9 horas. Hay que seguir las indicaciones hasta la vega de Orandi.

Inicio de la Ruta por camino empedrado
La ruta abandona pronto el empedrado y comienza a subir por el medio del monte Auseva, con castaños y fayas. El camino a trozos esta empedrado, pero del empedrado antiguo, no hay barro pero si restos del mismo en forma de bolas de tierra que se aplastan al pisar, este año hay agua por todos sitios.
Subiendo por el bosque, monte Auseva
Hayas retorcidas y muy verdes
La subida es constante y no da demasiado descanso, siempre por un sendero estrecho, hay marcas de haber subido por aquí las vacas hacia Orandi, y se nota que en las curvas de las zetas hay intentos de atajar. No hay mucha perdida porque ya sólo queda este camino de ascenso, a tramos si nos fijamos aparecen restos de murias de otros antiguos caminos ya olvidados. Después de la subida viene una zona llana, con una pequeña pradera, y después ya se baja hacia la vega de Orandi.

Final de la subida
La Vega de Orandi
A la entrada de la Vega, hay que ir hacia la derecha para ver la grieta por la que se sume el agua del arroyo las Mestas y que después forma la cascada. No hay puente para llegar cerca de la base, pero por unas piedras más o menos se pasa, aunque no se ve nada especial de la grieta natural.

La grieta por la que se sume el agua que luego aparece en la cascada bajo la Santina
Vista atrás de la primera campa de la Vega de Orandi
La ruta continúa siguiendo por un camino con algunas balizas, pasando por la margen derecha del arroyo, según baja el agua. Hay que ir un tramo hasta que se oye, o se intuye un arroyo que baja en cascadas desde la ladera del Sienra. Pero todavía hay que andar un cacho de praderas todavía.

El Arroyo las Mestas
Otro tramo de praderas por Orandi


Al final del tramo de praderas hay un cierre de una finca, con un paso en escalera para pasar al otro lado, y una cabaña bastante grande entre los espinos y demás árboles. Esta zona aparece en el mapa como Campo del Escobio, y Vallina la Iglesia. Si has llegado hasta aquí es que te has pasado, toca retroceder unos metros, cruzar el arroyo las mestas y buscar el arroyo que baja, precisamente por esa Vallina la Iglesia.

La Casa en la zona del Escobio
El arroyo que baja por la Vallina la Iglesia


Al lado del arroyo se intuye un pequeño sendero que asciende bastante de frente, es el que hay que tomar. En una zona de bosque se pierde un poco, y hay que ir por donde mejor se pueda, cruzarlo y subir dejándolo a la izquierda según subimos. Es una zona con algo de bosque y el sendero se difumina bastante. Después ya se sale del bosque, una zona con toxos y ahí si aparece mucho más marcado. Los pinchos hacen que los animales tracen menos caminos, y al final se consolida uno que sube hasta la collada de Sienra por todo este valle. Arriba se van viendo las rocas de caliza de la doble cumbre del Sienra.

Subiendo hacia el Sienra
Me despisto un poco, y en otro rellano con algo de bosque tiro hacia la cumbre Sur del Sienra, que no tiene buzón y tiene un camino muy roto, mucha caliza en lajas verticales, tipo lapiaz, avellanos saliendo de la caliza.... Bastante caótico, mejor no ir, y sobre todo si esta con bruma como este día. Después de alcanzar la cumbre secundaria, tuve que seguir peleando buscando el paso por entre la caliza hacia la cumbre principal, y deshacer un cacho de camino.

La cruz en la cumbre Principal desde la cumbre Secundaria
En la cumbre principal hay una cruz y un buzón de cumbres, en teoría es un mirador de toda la zona, pero el día no acompaña mucho. Niebla en la zona de los lagos, y bruma hacia el Norte.

Vistas hacia el Sur
Vistas hacia el Norte
Al Norte 5 minutos después
Priena con su Cruz
Después de estar un rato esperando a ver como evoluciona, si despeja algo en la zona de los Lagos, y cómo no cambia nada, continúo ruta hacia la Peña Cebeo, pasando por el Toyo. Primero hay que bajar al collado, y en esta cumbre principal si que hay algo de sendero para facilitar el tránsito, aunque sigue siendo por terreno calizo roto.

Hacia Peña Cebeo
En la collada hay que atravesar una zona de bosque de hayas, que ahora están con unos colores verdes increíbles, además el sol ayuda a darles más fuerza todavía. El Hayedo, por llamarlo de alguna manera, porque al final son varías hayas muy separadas pero que no dejan crecer nada debajo, está algo encharcado y las pezuñas de las vacas han creado zonas incomodas de paso. También hay que tener cuidado porque al otro extremo hay una alambrada de espino que hay que cruzar. Yo pasé por debajo de ella, y al otro lado hay algo de sendero que va subiendo hacia el Toyo donde quedan restos de un par de cabañas.

Atravesando zona de Hayas
Restos de Cabañas en la zona del Toyo
Por aquí, en esta zona del Toyo, Pozo cueto rasu, hay más o menos un sendero, aunque deben ser las vacas en su devenir el que lo han hecho, y se sigue bien hacia la zona de Peña Cebeo. Desde aquí despeja un poco y puedo atisvar la carretera que sube a los Lagos, así como las praderas de Orandi ya bastante abajo. La zona de la carretera me parece que es la Huesera y la zona de Tarañodios.

Abajo praderas de Orandi y por encima al fondo la carretera de los Lagos
Hacia Peña Cebeo
El sendero va en llano por una zona con buenas vistas hacia el valle, y desde el que se intuye bien el camino a seguir. Peña Cebeo no es la cumbre que creo, que esta al final de un espolón de caliza, sobre el valle, sino que está metido entre una zona de árboles, así que tengo que dar marcha atrás para encontrarlo. No merece la pena, sólo es una acumulación de piedras, y está rodeado de Hayas, las vistas no son buenas tampoco. Lo único, es que se ve hacia el valle por el que baja el camino de las Peregrinaciones. 

Peña Cebeo
Las praderas de la izquierda El Espadañal
Desde el Espolón las Mestas, la Vega y el valle Tresllúe
Desde Peña Cebeo vuelvo hasta el Espolón calizo, que tiene muy buenas vistas hacia el valle de Tresllúe con bosque de hayas, y alguna pradera con solitarias cabañas. La gente aquí tenía que estar muy aislada, no hay subida cómoda. Ahora toca bajar hacia la collada Cebeo, pero veo otro pequeño cerro donde subo para tener vistas del entorno, a ver si abre o se cierra más el día.


Desde el pequeño Cerro sobre la collada Cebeo
Al Sur-Oeste desde el pequeño Cerro sobre la collada Cebeo
Desde el cerro bajo hasta la collada, el terreno aquí no está tan roto, hay más zona de prados que de caliza, así que se puede bajar más o menos cómodamente. Un poco más abajo hay una buena fuente con pilón para reponer agua si se necesita. Hay que desviarse del camino un poco hacia la derecha para llegar a ella. Ahí, me encontré con un paisano que había subido a ver el ganado de un vecino, y me indicó por donde iba el camino para enlazar con la pista de Següenco, yo pensaba bajar directo por el valle, pero hay un camino por medio del bosque mejor. Al fondo del valle se ve un sendero que baja del camino de Següenco.

Valle de bajada a la derecha hay una fuente y el camino bueno a la izquierda por entre los árboles
Vista atrás del último cerro desde el camino, también se ve la cabaña del Espadañal
 El sendero es un antiguo camino empedrado a tramos, va por el medio del bosque al comienzo y en ligera subida, hay varios senderos que bajan más directos al valle y que hay que cruzar para tomarlo. Esta bastante limpio y cambia de valle, hacia el que sube a Vizcalluenga.

Valle de Vizcalluenga y en frente los Porros
 El sendero acaba se cruza con otro sendero que va hacia Vizcalluenga, y muy cerca hay un cercado para controlar el ganado de la zona, y poder montarlo en camiones, porque hasta aquí llega una estrecha pista desde Següenco. Paré a comer aquí, y no fue buena idea, las piedras de la rampa estaban llenas de garrapatas, debe de ser porque vienen a frotarse aquí el ganado.

El cercado con la rampa para el ganado
 Después de comer sigo por la pista dirección Següenco hasta debajo de otro pequeño cerro de caliza, aquí hay que tomar un desvío del camino, para tomar ya la ruta de las Peregrinaciones GR.205. Hay que estar atentos porque sólo hay una piedra con un flecha amarilla pintada para guiar. Pero primero subo hasta el cerro para otear el horizonte, el día ha despejado un poco.

Zona de Peña Cebeo

Hacia el Norte
Hacia la zona de Següenco
Foto esférica desde este otero en la Ruta de las Peregrinaciones:



Desde el cerro bajo hasta la pista, y tomo el desvío hacia Covadonga del Camino de las Peregrinaciones que baja por el Valle del Agua. El nombre está bien puesto, porque el camino está muy embarrado a tramos, con zonas profundas donde meter las botas. El primer tramo esta bien hasta la zona de Soperi, se va por una zona limpia de vegetación hasta llegar a las cabañas, escondidas entre los fresnos.

Bajando hacia Soperi
Restos de Cabañas en Soperi de Arriba
 En Soperi de Arriba se pierden un poco las marcas, hay que tirar con tendencia a la derecha y por una zona de prados hacia abajo, después ya aparece de nuevo el sendero y alguna marca del GR. A tramos se pierde la senda, sobre todo en zonas con prados, donde el ganado traza nuevas sendas y suelen ser más anchas que el camino oficial. Se nota que está un poco abandonado.

Bajando hacia el Estellero
 Este año el agua ha bajado por los caminos, así que están embarrados, y si se junta con el paso del ganado se tiene una buena papilla. Algunas veces se puede superar por el borde, pero hay tramos impracticables, sobre todo en las fuentes naturales donde van a beber el ganado que está más batido todavía.

Pequeña hoz que forma la Riega de Gustariego
El sendero va normalmente por zonas abiertas, entre brezo, pero a tramos también atraviesa alguna zona de bosque, cosa que se agradece porque el sol pica bastante hoy. En una zona de bosque es donde quedan los restos de otra cabaña.
Trozo de bosque
Hay que cruzar una portilla que cierra el sendero para continuar la bajada hacia las praderas de Peñalba. Por cierto aqui el sendero ya no está tan embarrado, pero tiene muchas rocas más colocadas, así que también se avanza con lentitud, hay que ir pensando donde poner el pie en cada paso.


Vista atrás del tramo recorrido
 En la zona de Peñalba el sendero llega a una zona de praderas y se pierde un poco. Hay que ir por el medio de los prados, pero como había ganado y un toro mejor evitarlo. Yo seguí una especie de sendero, y cuando me dí cuenta estaba al otro lado de una alambrada de espino que cerraba por arriba el prado. Menos mal que estaba sin cerrar en el otro extremo y pude volver a la pradera y enlazar con el camino más abajo.

Praderas llegando a la zona de Peñalba
La Cabañona-cuadra de Peñalba
 Tras el primer prado con una cabaña se llega a una zona más amplia, que tiene dos cabañas inmensas, una de ellas con un tendejón inmenso. Estos prados debían de producir mucha hierba. En la parte de abajo de estas cabañas hay los restos de otras dos en peor estado. Aquí de nuevo escogí mal el camino, ya que fui por la derecha de la cuadra y hay que ir por la izquierda para enlazar con el inicio de la pista que baja a Covadonga.

La Cabañona de Peñalba

Por los dos lados se acaba llegando hasta la pista, yo cruce por un paso con cuerdas la alambrada del prado sin problemas. Ya sólo queda bajar por un bosque de castaños siguiendo la ancha pista. Durante el trayecto se me cruzo un zorro, y después había algún animal más grande haciendo ruido en el bosque, no intenté buscarlo por si acaso se molestaba.

La pista de bajada a Covadonga
Covadonga
Una ruta no demasiado larga por los datos de longitud y desnivel, pero que se hace dura por el terreno roto que hay que atravesar. Para tener vistas hay que tener un buen día, sino mejor dejarla para otro día y buscar otra actividad por la zona.